En el número 21 de la Gran Vía, coronando el elegante edificio del NH Collection Gran Vía, se encuentra Picalagartos Sky Bar, un lugar que ha conseguido consolidarse como uno de los rooftops más deseados de la ciudad gracias a su combinación de gastronomía de autor, coctelería creativa y unas vistas 360º que cortan la respiración.
Situado en la octava planta, Picalagartos ofrece una vista inigualable de la Gran Vía y sus alrededores. Desde sus mesas y su barra al aire libre se puede contemplar el edificio Telefónica, las cúpulas modernistas y el bullicio de la calle más icónica de Madrid desde una perspectiva única.
El acceso es directo desde el hotel, pero está abierto a todo el público, lo que lo convierte en un punto de encuentro cosmopolita donde se mezclan viajeros internacionales y madrileños que buscan un plan especial.
La decoración combina un estilo contemporáneo con guiños al Madrid clásico. Muebles de diseño, materiales nobles como madera y mármol, y una iluminación que se adapta al momento del día crean una atmósfera sofisticada pero acogedora. En verano, las plantas y flores de la terraza aportan frescura y color; en invierno, las estufas y mantas mantienen el confort.
La música acompaña sin imponerse, con una selección de soul, bossa nova y chill out durante el tardeo, que más tarde evoluciona a ritmos más animados para la noche.
Picalagartos cuenta con el asesoramiento gastronómico del reconocido chef Javier Muñoz-Calero, lo que se traduce en una propuesta cuidada, de base mediterránea pero con guiños internacionales. Platos como el pulpo a la brasa con puré de boniato, el tartar de atún con aguacate o las croquetas de jamón ibérico cremosas son imprescindibles.
Para el tardeo, la carta incluye opciones ideales para compartir: tablas de quesos, jamón ibérico, ceviches frescos y pequeños bocados gourmet.
La coctelería de Picalagartos es uno de sus puntos fuertes. El equipo de bartenders crea recetas originales inspiradas en la ciudad y en las estaciones:
Gran Vía Mule, con vodka, jengibre fresco y lima.
Picalagartos Spritz, con Aperol, cava y piel de pomelo.
Cielo Negroni, con ginebra infusionada en lavanda.
Además, cuentan con una carta de vinos amplia y champanes para celebraciones especiales.
Por la tarde, la luz natural ilumina la terraza y la convierte en un espacio perfecto para una reunión relajada con vistas. A medida que se acerca el atardecer, la terraza se llena de parejas y grupos de amigos que buscan disfrutar de un cóctel mientras el cielo de Madrid cambia de color.
El servicio es profesional y atento, algo que refuerza la experiencia premium.
Picalagartos Sky Bar no es solo un rooftop con vistas, es una propuesta gastronómica y de ocio integral en el corazón de la Gran Vía, con un ambiente elegante y cosmopolita que lo convierte en una apuesta segura para el tardeo.